El crecimiento de los subsectores económico del departamento de San Miguel,  lo posiciona  como uno de los más importantes de la zona oriental. A pesar que por  años las diferentes actividades productivas (turismo, artesanías, producción agropecuaria, agroindustria, tecnologías de información y comunicación) han estado trabajando de forma desarticulada en lo económico y social, afectando la calidad de vida de los habitantes (en especial las zonas vulnerables) y el impacto económico del departamento.

En el 2018, un grupo de profesionales y empresarios visionarios deciden constituir una fundación sin fines de lucro, denominada ADEL San Miguel para articular los sectores productivos del departamento y lograr mejorar la calidad de vida de sus habitantes, mediante gestión de proyectos que permitan el desarrollo económico, social, cultural, humano y ambiental; promoviendo la equidad de género y la participación de jóvenes y actores claves de la sociedad.

Ese mismo año se empiezan las gestiones para registrar la fundación, la cual está conformada por 4 empresas migueleñas y 12 profesionales, que en conjunto buscan fomentar el emprendedurismo y la generación de empleo en todos los sectores productivos del departamento para generar un mayor impacto económico.